viernes, 26 de septiembre de 2008

Lluvia




Hoy la lluvia me escupió a la cara.
Golpeó tejados con ráfagas de cristales rotos
no hizo charcos, sólo arroyos.
Sacó chispas de las cuerdas
mareó valles
quebró trastes.

Hoy la lluvia, encrespada,
desfloró la tierra.
Vino con ganas de guerra
y ganó la batalla.

martes, 23 de septiembre de 2008

Reencuentro






Entro y salgo.
Quizás fue el olor
o esa melena negra.
Antes no estaba ella,
solo el color.
Ahora sí, te veo.


Entro,
me zambullo de cabeza.
Entre almohadones de látex natural
una lengua desenrosca el tiempo
alrededor de mi cintura
tirando a patadas
las puertas de la relatividad.


Salgo,
con una certeza,
la de no querer quedarme.
Prefiero la posibilidad
de sentir el goce
de volver a entrar.

lunes, 22 de septiembre de 2008

Melocotones




En el silencio de la mañana, comienzo a oír un rumor. Creía que surgía en mi cabeza pero, al abrir la puerta ha adquirido más fuerza.
Ahora los veo. Cientos, miles de melocotones ruedan monte abajo y― por el camino que llevan― acabaran en mi patio.
No sé de donde han podido salir, pero me da igual. Estoy de suerte. Tengo hambre.